Tal vez él tenga razón. Tal vez siempre la tuvo y yo me negaba a creer la inminente realidad.
Es muy posible que haya pasado toda mi vida engañada por un mundo de falsas ilusiones, un mundo de maravillas.
He querido ser positiva, hasta incluso optimista. Pero la realidad me demuestra lo contrario. Lamentablemente estoy en una sociedad donde el amor, el "ideal" de amor, se encuentra muy desbalorizado, casi en desuso. Por alguna razón, hoy por hoy, las personas pareciere que se juntan al sólo efecto de satisfacer sus necesidades, cualquiera que ella sea.. y es un bajón, porque la mayoría me ve (a mí o a cualquiera) y en seguida piensan en cojerme (perdón el exabrupto pero es la palabra indicada para describirlo) y sin embargo, nadie piensa en amarme.
Las necesidades de muchos es el sexo, la mía, el amor.. ¿Y dónde consigo eso? ¿Se comprará en algún lado? Lo muy probable es que tenga que fabricarlo.. Tal vez tendría que comprarme un perro si lo que quiero es cariño incondicional.
Tal vez sólo tendría que conformarme con mi presente y con lo que tengo.
Tal vez debería aislarme del mundo entero.

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